Arribamos a Navelgas el pasado 24 de agosto después de recorrer casi toda Asturias, aunque ahora con la autovía casi concluida y ya sin esa vorágine de fiestas, de compromisos, de playa, de reencuentros, de comidas, que suelen afluir a los primeros días de agosto todo se pudo hacer más reposado y con más sabor.
Además si te mentalizas, en media hora vamos, quiero decir: media hora a Llanes, media hora a Villaviciosa, media hora más a Oviedo, Grado, La Espina, Tineo, Navelgas.
Llegamos a la "capital del oro" con mucho ambiente, sobre todo, en la calle mayor, espacio crucial de la fiesta: ondeaban las banderas, sonaban los tambores y cornetas de las charangas, las serpentinas y papel picado daban al suelo un colorido festivo? Navelgas nos recibió desde el primer momento con esa hospitalidad y cordialidad que hace tantas veces grandes a los pueblos de Asturias. Los miembros de la asociación "El Arbedeiro" se encargaron de ponerla en práctica y tanto Nacho, como Marcos o Alba, todos ellos muy jóvenes, nos recibieron y acompañaron con atenta generosidad. Más tarde comenzó el acto central del Día de los Pueblos de Asturias, que arrancó con una intervención de Manolo Linares, verdadero alma de esta fiesta, ya veterana en el calendario festivo de nuestra comunidad y declarada de Interés Turístico Regional.
A continuación se entregaron los premios. Como Arándano de Plata de este año agradezco este galardón porque reconoce una actividad, el juego de los bolos, que verdaderamente siento y disfruto y que nunca antes había sido premiada en esta fiesta tradicional. Y además, porque celebramos el Día de los Pueblos y los bolos han sido una actividad muy importante en los pueblos asturianos durante muchos siglos. Hoy ambos están en decadencia; pero a pesar de todo siguen ahí, porque son fuertes como los robles.
También me agradó poder entregar unos regalos a unos jugadores de Navelgas: Javier Rodríguez y Samuel Fernández, que velan por el torneo de bolos más importante del pueblo: "La Caridad", representante singular de esa gran modalidad de bolos denominada bolo de Tineo, hoy también llamada bolo celta. Es muy importante apoyar y defender a las personas que están detrás de las competiciones que se mantienen en el tiempo, ya que dejan para siempre su marca en ellas. Su buen hacer hay que divulgarlo no sólo por el concejo, sino también por la región, porque se trata del mejor capital de esas competiciones.
Además, fueron también premiados el pueblo de Bueño a través de su alcalde José Ramón García, que recibió la "Paloma de la Fraternidad". La Central Lechera Asturiana, a través de su presidente, Bertino Velasco, y Florentino Martínez Roces, presidente del Centro Asturiano de Málaga, y Langreanos por el Mundo recibieron el "Chosco de Oro". Sirvan estas líneas para felicitar, de nuevo, a todos ellos.
Más tarde vino la comida en el parque próximo al grupo escolar de Navelgas. La gente se fue colocando por pueblos y grupos de amigos presentando el recinto un ambiente de gran hermandad y colorido. Gran trabajo de los componentes de la asociación "El Arbedeiro", que repartieron con gran orden y diligencia un elevado número bolsas de comida.
En la sobremesa pudimos disfrutar y compartir el buen humor y la agradable conversación y excelente tonada gracias a Celestino Rozada, que nos acompañó y que contó con la ayuda de Pedro "Machaca" y el joven gaitero peñamellerano Alfonso Verdeja, además del complemento de su compañera de tonada, la tinetense Mari Luz Cristóbal Caunedo.
El domingo Oriente y Occidente nos ignoramos menos, nos conocimos algo. Nosotros volvimos por Aristébano contentos, recordado otros tiempos en que viajábamos juntos más a menudo, aunque no llegáramos más allá de Lastres. El año que viene quizás volvamos?
Los bolos volvieron a demostrar que, a pesar de todo, siguen siendo un puente con la sociedad y la comunicación.